GRUPO DEPORTADOS ASTURIAS

                                             Homenaje en la Xunta el día 3 de febrero de 2023

El principal objetivo del Grupo Deportados Asturias, es el reconocimiento de la lucha por la libertad, de los cientos de hombres y mujeres que después de pasar las penurias de una guerra civil y del exilio, fueron  deportados a campos de concentración nazis.

El inicio del trabajo lo comenzamos en el mes de febrero de 2020, en ese momento, decidimos iniciar  un proyecto que consistía en completar un listado con los asturianos y asturianas que terminaron en estos campos del horror y escribir todas y cada una de sus historias.

La investigación comenzó solicitando documentación a Registros Civiles, Ayuntamientos, Archivos españoles, franceses, alemanes, etc.…para reunir toda la información que ayudase a entender quiénes eran y cómo acabaron en esos lugares de sufrimiento y exterminio. Hemos conseguido reunir mucha documentación  de cada uno de ellos, tanto en formato online como físico, hemos consultado una amplia bibliografía, de manera altruista,  adquiriendo copias documentales y libros, para una rigurosa investigación.

Otro de los objetivos, era conseguir que las administraciones públicas, conocieran el proyecto y se involucraran en él. Desde el principio, la anterior Directora General de Memoria Democrática del Principado de Asturias, Begoña Serrano, ha contado con el Grupo, y hemos sido convocados a varias reuniones, videoconferencias, y otros eventos relacionados con la Memoria Democrática. A instancias del Grupo, se ha creado un apartado en la página web de este organismo, completando el apartado de Deportados, con cada historia que les enviamos. En la actualidad ya son 140 historias de vida , que se pueden consultar desde cualquier parte del mundo.

La búsqueda familiar es algo que consideramos imprescindible, ya que muchas de ellas no tienen ninguna información y agradecen saber, qué ocurrió con aquella persona que un día desapareció y de la que no supieron nunca más. También las familias aportan fotografías, cartas, recuerdos, etc.. que nos ayuda mucho en la investigación. Gracias a este trabajo, se ha tejido una extensa red de familiares, en toda España, Europa y América, para compartir ese pasado común y tratar de encajar las piezas de esas historias familiares que constituyen un capítulo de la historia reciente del mundo.

La difusión, también es imprescindible, para que se conozca todo lo ocurrido. Incluso el pasado invierno, un periodista estadounidense, entrevistó a representantes del grupo,  para un artículo en un diario digital.  Muchos centros educativos, nos invitan a participar en charlas y jornadas de memoria, sobre el exilio y la deportación. 

La publicación de un libro que recoja toda esta información es otra de las aspiraciones del grupo, siendo una de nuestras propuestas al Principado. En el caso de Gijón, ya está en proyecto, una publicación con las biografías de todas las víctimas.

La colocación de los Stolpersteine en cada lugar de Asturias, es otra petición del Grupo, consiguiendo que en Gijón, con la disposición absoluta de Salomé Toral,  se colocasen 34, también en Carreño y Villaviciosa. Colaboramos aportando al Principado, todos los datos necesarios para pedirlos a Alemania.

Otro de los objetivos que figuraba en nuestro proyecto,  era la celebración de un reconocimiento a las víctimas, en el máximo órgano representativo de Asturias; y para ello solicitamos, que fuese la Junta General del Principado el lugar donde debería rendirse el homenaje. La propuesta fue bien acogida y el homenaje con presencia de las familias, los miembros del grupo, el presidente de la Junta General, Marcelino Marcos y el del Principado de Asturias, Adrián Barbón, tuvo lugar el pasado 3 de febrero de 2023.

Desde el inicio del  proyecto, el Grupo Deportados Asturias, ha instado al Principado de Asturias, la colocación de un Muro, en un lugar visible, donde se escriban todos los nombres de las víctimas. En el acto de febrero insistimos en la necesidad, logrando el compromiso del Presidente del Principado de Asturias.

En este momento el trabajo  continúa, hasta conseguir cerrar las biografías de los 188 asturianos y asturianas, censados hasta el momento. 

Grupo Deportados Asturias

Componentes: 

Begoña Álvarez Cienfuegos

Carlos Barrio González

Luis Miguel Cuervo Fernández

Lourdes Cuetos Orvíz

Maribel Luna Baragaño

Esther Martínez Álvarez

Balbina Rebollar Batalla

José Luis Villaverde Amieva

 

Colaboradores/as

Claudine Allende Santa Cruz

Ana García Santamaría

Virginia Gil Torrijos

Begoña M. Canal

Patricia Martínez (RPA)

Flor Menéndez Álvarez

Antonio Muñoz Sánchez

Verónica Noval

Lucía Rodríguez Begega

Juan Pedro Rodríguez Hernández

Xuan Santori

 

 

 

Fidel Balbas Salas, de Palencia/ Langreo

 

                                               

Fidel Balbas Salas, nació en Quintana del Puente (Palencia),  el 24 de abril de 1915. Era hijo de Felipe y Carmen, ambos naturales de Torquemada (Palencia) y de profesión hortelanos.

Fidel se trasladó a Asturias, donde trabajó como minero. A los 20 años y recién fundado el Sindicato Minero Único en 1935, se afilió a él. Un año antes, en 1934 fue miembro del Partido Comunista en la agrupación de San Esteban de las Cruces (Oviedo). Fue secretario político de los Milicianos de Asturias. En la guerra civil llegó a la graduación de teniente, como así publicó el Boletín Oficial de Defensa de 16 de octubre de 1938. En mayo de 1938 estuvo preso en el fuerte de Carchuna donde  se produjeron dos evasiones masivas de presos republicanos. Una fue un éxito completo. La otra acabó siendo una enorme matanza.

“En el fuerte de Carchuna, en la costa granadina, estaban presos 308 soldados asturianos capturados por las tropas franquistas tras la caída de la zona norte republicana el otoño anterior. Carchuna estaba muy cerca de la línea de frente. El 16 de mayo, se fugaron cuatro oficiales que consiguieron llegar hasta las líneas republicanas. Con la información que aportaron, se terminó de preparar una operación comando para rescatar al resto de sus compañeros. Dos lanchas salieron de Castell de Ferro el día 23. Portaban a treinta y cinco  voluntarios (entre ellos cinco brigadistas internacionales) que desembarcaron formando cuatro grupos. Uno cortó las líneas telefónicas que conectaban el fuerte con Motril y Calahonda. El segundo grupo se apostó en la carretera a Calahonda para proteger la huida. El tercer grupo llevaba los explosivos. Y el cuarto y más numeroso se encargó del asalto.

Tras tomar el fuerte fusilaron a un alférez al mando y a cuatro suboficiales que los presos dijeron que habían sido especialmente crueles con ellos, mientras que dos sargentos y unos veinte soldados de la guarnición se unieron (otras fuentes dicen que fueron tomados como rehenes). Unos veinticinco presos decidieron quedarse en el fuerte. Los liberados y los comandos se dirigieron a pie en dos columnas hacia las líneas republicanas, enfrentándose en el camino a los soldados franquistas. Un ataque artillero republicano creó la diversión necesaria para que lo consiguieran. La placa en la puerta del fuerte que desde 2018 recuerda los hechos ha sido atacada en numerosas ocasiones. Fidel Balbas fue uno de los evadidos. “

Posteriormente estuvo destinado en el cuadro eventual del Ejercito del Ebro. Consta que allí estaba el 12 de octubre de 1938.

Estaba casado y se exilió en Francia, formando parte de la 34 Compañía de Trabajadores Extranjeros desde el 1 de abril de 1939 en Saint Cyprien en la región de Dauphine- Savoie y posteriormente en La Palud (Savoie) y en Saint Remy. Se desconoce la fecha exacta en la que fue capturado y trasladado al Frontstalga 123 de Langres.

Llegó a Mauthausen el 24 de mayo de 1941 y se le asignó el número de matrícula 4718. Primero fue trasladado al subcampo de Ternberg, un Kommando que se fundó el 25 de enero de 1943 en la región de Steyr, al sur de Linz, para la construcción de una de las presas hidroeléctricas del río Enns. Estos debían abastecer a las fábricas de armas cercanas. El sitio fue evacuado el 18 de septiembre de 1944.

Después fue trasladado al subcampo de Melk, uno de los subcampos más importantes del campo de Mauthausen y el mayor de Baja Austria. Fue inaugurado el 21 de abril de 1944 en los terrenos del cuartel de ingenieros.

Los primeros días tras la liberación del campo de concentración de Mauthausen, las autoridades estadounidenses ya habían iniciado investigaciones sobre posibles criminales nazis. Detuvieron a miles de miembros de las SS y antiguos funcionarios de la prisión en campos de internamiento bajo medidas de "arresto automático". En los meses siguientes, los ocupantes franceses, británicos y soviéticos también iniciaron investigaciones en sus propias zonas en busca de sospechosos

El subcampo de Melk se creó bajo el nombre en clave “Proyecto Cuarzo”, así como el Subcampo de Viena. Tres de los seis juicios franceses de Mauthausen fueron vistos ante el Tribunale Générale en Rastatt, Alemania Occidental, y finalmente desembocaron en sentencias de muerte y la ejecución de los tres acusados, entre ellos Fidel Balbas Salas acusado de asesinar a varios de sus compañeros mediante brutales  palizas.

Josefa Balbas Roces, que podría ser hija de Fidel, presenta el 30 de enero de 2001 ante el Juzgado número 2 de Langreo un edicto para el inicio del expediente para la declaración de fallecimiento de Fidel Balbas publicado en el Bopa del 27 de febrero de 2001. Se desconoce el final del procedimiento.

                                               

 

Fuentes:

-       Memorial Campo de Melk

-       Archivos Arolsen

-       Boletín del Principado de Asturias

-       Registro Civil de Quintana del Río

-       www.buscarcombatientes.es

-       https://vscw.ca/es/node/345

 

Redacción: Esther Martínez

Documentación: Esther Martínez, Manuel Torres y Maribel Luna

Grupo Deportados Asturias

Pedro Carreira Pedrosa, de Villamayor ( Infiesto)- Biografía de Etxahun Galparsoro

 

 

 Etxahun Galparsoro

02/01/2025

CARREIRA PEDROSA, Pedro

Pedro Carreira Pedrosa. Nació el 03/04/1918 en Moñes (Villamayor - Infiesto) como hijo de Benito Carreira López y de Julia Pedrosa Inorizo. En fecha indeterminada emigró con su familia a Bilbao, donde residían en la calle Sagarminaga nº47. Empleado o jornalero, estaba afiliado a la JSU y a la UGT.

Tras la rebelión militar de 1936 se unió a los defensores de la República, encuadrado en el batallón Stalin (Meabe nº2) que organizaron las JSU. Su hermano José figura en las nóminas del batallón Malatesta de la CNT. Es de suponer que a finales de 1936 Carreira participó en la fracasada ofensiva de Villarreal, en enero de 1937 actuó en las inmediaciones de Eibar, que en la ofensiva franquista del 31 de marzo se enfrentó al enemigo en el monte Albertia o que mayo luchó en el monte Sollube.

Tras la pérdida de Bilbao en junio, el batallón Stalin en el que luchaba Carreira se desintegró como consecuencia de la ofensiva franquista sobre Santander en agosto, siendo capturado en la zona de Laredo-Santoña. En cuanto a él, se sabe que sus superiores lo dieron por desaparecido en combate de retirada. Y aquí se pierde su pista.

Se desconoce qué fue de él entre agosto de 1937 y febrero de 1939. Pero a su familia le constaba que en febrero de 1939 estuvo internado en un campo del sudoeste francés. A tenor de este dato, su posible trayectoria se reduce a dos hipótesis: que en Santander hubiera conseguido embarcar en algún pesquero rumbo a Francia y desde aquí fuera enviado a Cataluña, donde combatiría hasta la derrota de febrero de 1939; o que en Santander hubiera sido hecho prisionero y que en algún momento dado, estando destinado no lejos del frente (como soldado o como trabajador penal) hubiera alcanzado las filas republicanas, para seguir combatiendo en Cataluña.

Como se ha dicho, se sabe que en febrero de 1939, tras la toma de Cataluña por las tropas franquistas, Carreira fue internado en uno de los campos que el Gobierno francés abrió en el sudoeste, en las playas del Rosellón. Aquí se vio obligado a enrolarse como soldado en la Legión Extranjera francesa (o en los Regimientos de Marcha de Voluntarios Extranjeros) o como prestatario en las Compañías de Trabajadores Extranjeros y muy probablemente fue destinado a las inmediaciones de la Línea Maginot.

En mayo-junio de 1940 la Wehrmacht, el ejército alemán, lanzó una ofensiva en su flanco occidental y en unas pocas semanas se apoderó de los Páises Bajos, Bélgica y Francia. Por su posterior trayectoria se deduce que Carreira fue apresado el 22 de junio en la bolsa de Epinal.

Llevado a pie hasta el Stalag V-D de Estrasburgo, aquí ingresó con el nº 3.012. Es muy probable que tuviera afanarse en los diversos trabajos forzados que los alemanes impusieron a sus presos: desmantelamiento de elementos militares,

 

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lógistica de lo que robaban en Francia para su traslado al Reich o desmantelamiento de equipos industriales para su envío a Alemania.

La situación de Carreira dio un giro cuando hacia el 10 u 11 de diciembre de 1940 la SS se presentó en el Stalag. Unos 800 republicanos españoles fueron separados del resto de los prisioneros de guerra (ingleses, franceses y polacos, mayormente) y llevados hasta la estación de tren, donde embarcaron violentamente en furgones de ganado. Dos días después el convoy apareció en Mauthausen, donde todo el contingente fue deportado por su condición de “rojo-españoles”.

Sobre su estancia en el campo de Mauthausen apenas se sabe nada. Tan sólo que en 1943 pudo escribir a su casa, cuando los republicanos españoles fueron autorizados a hacerlo.

Carreira falleció a las 08:10 horas del 4 de marzo de 1944, con tan sólo 25 años. Fue víctima de un proceso de desgaste en el que se combinaban los trabajos forzados, la escasa indumentaria y un hambre crónico y atroz. Murió en la Sanitätslager o enfermería del campo, oficialmente a causa de una “bronconeumonía”. A pesar de que en las diversas bases de datos y publicaciones se indica que falleció en Gusen, el certificado oficial de defunción deja constancia de lo mencionado (además, su nombre no figura en el Totenbücher de Gusen, en el registro de fallecidos).

Posteriormente sus progenitores pasaron a residir en calle de las Ollerías Bajos 9 de Bilbao.