(FAMILIA ÁLVAREZ FERNÁNDEZ)
Nació el 26 de abril de 1928, en Caborana, parroquia minera del valle del concejo asturiano de Aller. Sus padres eran Amador Álvarez, minero natural de Rano del concejo de Quirós y Natividad Fernández , nacida en Oviedo. Ángeles era la sexta hija, la más pequeña cuando con seis meses su familia emigra a Francia en 1928 en busca de un futuro económico tras la pérdida de trabajo del padre . En el país vecino se instalaron en la población minera de Àles, en el departamento de Gard , de la región del sudeste Languedoc- Rosellon. Toda la familia Álvarez Fernández fueron miembros de la resistencia contra la ocupación alemana de Francia. El padre murió combatiendo en el Frente de Aragón cuando regresó a España en 1936 para defender La II República frente al golpe de Estado franquista.
Ángeles
participó desde los 12 años con el FN (Frente Nacional de lucha por la
Independencia de Francia) tras el comienzo de la II Guerra Mundial. En 1943 fue
detenida, con apenas 15 años, por difundir propaganda contra la ocupación nazi y
contra las autoridades colaboracionistas del régimen de Vichy. En un corto
período de tiempo son apresados cuatro
miembros de la familia : Ángeles,
Amador, Ángel y también su propia madre, Natividad.
Tras el paso por varias prisiones
(como Alès y Nîmes), viene para Ángeles el campo de Brens (Tarn). Luego será
llevada al campo de internamiento de Noé (Alto Garona), prisionera aquí cumplirá
los 16 años y se reencontrará con su
madre, también internada. Hubo entre el personal del campo quien, al considerar
la edad de Ángeles, le planteó la posibilidad de intentar sacarla de allí (lo cual le hubiera
evitado la deportación), pero ella se negó rotundamente a abandonar a su madre.
Fue deportada a Ravensbrück desde la estación de Toulouse
con su madre Natividad, al campo de concentración para mujeres al norte de
Berlín. El convoy salió el día 31 de
julio de 1944. Justo antes de la partida, Ángeles iba a escuchar unas palabras
inquietantes de un soldado nazi que iban a quedarse en su memoria para siempre: “Y yo digo a un alemán: Pero, ¿dónde
vamos? ¿Dónde nos llevan? Y nos dice: “Donde las mujeres guapas se ponen feas”.
Así me contestó el tipo, en francés”.
El viaje a Ravensbrück dura diez días, de los que su peor recuerdo es la sed angustiosa.:
“ Estábamos todas con una sed que
nos moríamos… por la noche, metíamos la lengua en la pared, en las rendijas del
vagón… porque hacía un poco de frescura. ..Y no comíamos nada”.
Ángeles tenía el número de
prisionera 49689 y permaneció en el campo de concentración nazi casi un año. Centró sus esfuerzos en proteger a
su madre, que por entonces rondaba los cincuenta años y a quien veía cada
día más frágil y desmoralizada.
Ambas iban
todavía a vivir unas circunstancias particularmente difíciles en los momentos
finales de la guerra. El ejército soviético se acercaba y, al ser evacuado el
campo, las presas fueron obligadas a
días de marcha interminables, una de las llamadas “marchas de la muerte” : “En
Ravensbruck abrieron la puerta y salió todo el mundo fuera. Y a cada lado,
alemanes con los perros y los fusiles. Si alguien no podía andar. La
mataban y ya está.”
Mientras la
columna de mujeres seguía caminando, algunas presas sufrían mordeduras de los
perros de los SS. A su madre le flaqueaban las fuerzas, pero Ángeles acababa consiguiendo levantarla
cuando se derrumbaba. Fueron días en que dormían en el suelo, en los campos,
mientras se cruzaban con columnas de tanques que circulaban en todos los
sentidos en el caos entre el avance de los aliados y la huida de las tropas nazis. Un día, inesperadamente, sus guardianes (que en los últimos momentos
habían sido reemplazados por hombres de mayor edad) habían huido. Eran ya
libres, pero quedaba por delante un largo camino de regreso. De todos modos,
incluso ya de nuevo en Alès, Ravensbrück nunca iba a quedar atrás
para madre e hija, y la memoria traumática de su deportación iba a acompañarlas
siempre.
Ángeles tras la liberación formó una familia en Alès. Murió el 15 de junio de
2019 en Saint Hilaire de Brethmas (Gard). En su funeral su hermano Ángel
Álvarez, condecorado en Francia por su activa participación en la guerrilla contra
los nazis, habló emocionadamente de su hermana en el acto de despedida.
Biografía escrita por Begoña Álvarez Cienfuegos
Grupo Deportados Asturias
Fuentes:
- Registro Civil
- Amical de Ravensbrück
- Archivos Arolsen
- Documental Nombres para el recuerdo.“Libro Memorial, Españoles deportados a campos nazis”(1940-1945)”. Benito Bermejo y Sandra Checa. Canal UNED
Una vida que podíamos pensar que sólo ocurre en las películas, pero la realidad puede ser mucho más cruel que la ficción
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